Historia

La contabilidad se descubre como ciencia aún en el siglo XIV cuando Luca Pacioli (1494) afirmaba que para dedicarse al comercio, los negocios y operar con debida eficacia, las operaciones necesitaban ser «registrados y anotados de forma ordenada a fin de que se pueda tener noticia de cada uno de ellos con rapidez». Por ello La contabilidad cumple así una primera función. Imprescindible, que es de información, pero además debe ser creíble por los usuarios, sin embargo en el Incanato (Siglo XII) existía ya una especie de sistema contable desarrollado a través de los Quipus, que consistían en un conjunto de soguillas de distintos colores y anudadas de tal manera que pudieran representar cantidades, y a los operadores de estos quipus se les denominaba QUIPUCAMAYOC (contador) y a sus revisores Tucuyricuc (auditor) encargados de verificar su corrección y exactitud.

Los forjadores y fundadores del Colegio de Contadores del Perú, filial Cusco fueron los colegas egresados y universitarios de la Facultad de Ciencias Económicas, de la Universidad Nacional San Antonio Abad del Cusco, liderados por el CPC, Dr. Antonio Callo Cáceres; secundado por los colegas Emilio Rodríguez, Carlos Pineda Obregón, Justo Pastor Meses, Horacio Fortón, Daniel Castillo, Jorge Aguirre Villalobos, Isaac Aparicio Páez, Francisco Aragón Saravia, Juan Boza Castelo, Alfredo Casabone, Rafael Calderón Peña, Aníbal Hernán Zegarra, José Morales, Alfonso Stein, Carlos Traverso, Julia Pareja, Alejandrino Villena, Francisco Loaiza Jesús Cuadros, Heraclio Fuentes Álvarez, Alcides Gonzales, Francisco Luppo, Amanda Moscoso, Augusto Núñez Melgar, y Piedad Valencia Álvarez, y los señores egresados Arístides Ramos y Alfredo Sánchez, quienes fundaron y constituyeron el mismo el 3 de noviembre de 1952 entrando en funcionamiento el 27 de noviembre de 1952, en ese entonces se incorporaba a profesionales de Cusco, Madre de Dios y Apurímac.